Hay un lema popular dentro del movimiento por la libertad que dice:
Nadie vendrá a salvarte. Tienes que salvarte a ti mismo».
Otra versión de esta afirmación dice:
No hay ningún Dios externo que te ayude. Tienes que manifestar tu propia divinidad».
Circulan distintas versiones de estas afirmaciones, pero todas expresan la misma creencia: salvar el mundo depende de nosotros. Tenemos que levantarnos con nuestras propias fuerzas y hacer lo necesario para construir un mundo mejor. Aunque, evidentemente, esto es perfectamente cierto, hay mucha gente que va un paso más allá y rechaza radicalmente cualquier ayuda de arriba o de fuera e incluso la considera «mala». Cualquier forma de ayuda política es, por definición, poco fiable, y cualquier reconocimiento de que existe un Creador que sabe cómo ayudarnos se considera igualmente erróneo.
Nosotros nos bastamos. Todo depende de nosotros. Nosotros salvaremos el mundo. No necesitamos ni a Dios, ni a Jesucristo, ni a Trump, ni a Thierry, ni a ningún otro salvador.
Aunque, por supuesto, es cierto que la clave para transformar nuestro mundo es que todos nos levantemos y pongamos de nuestra parte en el despertar masivo y la liberación de la humanidad, también hay un error fundamental en creer que podemos hacerlo todo nosotros mismos. He aquí algunos ejemplos de lo que los ciudadanos de a pie no podemos hacer:
✔︎ Acabar con la industria mundial del tráfico de niños
✔︎ Acabar con la industria mundial del adrenocromo;
✔︎ Detener la corrupción en las agencias gubernamentales;
✔︎ Detener el sistema criminal de la banca central;
✔︎ Detener los chemtrails globales y la manipulación del clima;
✔︎ Detener los mandatos de vacunación;
✔︎ Detener los crímenes de la industria farmacéutica;
✔︎ Detener las guerras globales;
✔︎ Detener la corrupción política;
✔︎ Detener los programas MK Ultra;
✔︎ Detener las reuniones satánicas donde los líderes mundiales hacen sacrificios humanos y reciben instrucciones de los demonios;
✔︎ Detener las operaciones mundiales de narcotráfico, blanqueo de dinero y otras actividades delictivas internacionales;
✔︎ Acabar con los biolaboratorios de todo el mundo donde se fabrican patógenos peligrosos para la guerra biológica contra la humanidad;
✔︎ Acabar con el monopolio de la Gran Tecnología que suprime la verdad e impone la tiranía sobre el pueblo;
✔︎ Y así podría seguir y seguir....
Esto es sólo la punta de un iceberg inconmensurable de maldad de alto nivel que ninguno de nosotros puede cambiar. Para todas estas operaciones malignas, necesitamos ayuda. Ayuda de fuera y ayuda de más arriba.
En primer lugar, necesitamos la poderosa ayuda de lo Alto, de nuestro Todopoderoso Creador de toda vida, la Fuente del verdadero amor, el Dador de todo bien, el único que tiene el poder de intervenir al más alto nivel en nuestro mundo.
Sin la ayuda del Todopoderoso, estamos condenados, y eso es un hecho. Esto no es religión, sino la sobria realidad. El hombre puramente dentro de sí mismo no tiene el poder para destruir completamente a los muy poderosos gobernantes demoníacos. Necesitamos la ayuda de Dios. Más de lo que pensamos. Utiliza el siguiente enlace para saber más sobre quién es Dios.
En segundo lugar, necesitamos personas en los puestos más altos del gobierno que sean instrumentos del Creador, para detener el mal y establecer el bien como base en la sociedad.
Podemos pensar y gritar todo lo que queramos, es un hecho incontrovertible que sin líderes políticos justos, esencialmente nada puede cambiar en un país. Al fin y al cabo, todo país funciona con un gobierno, que es en última instancia la máxima autoridad de nuestra sociedad. Necesitamos políticos poderosos, rectos y dignos de confianza en lugar de delincuentes corruptos. Utilice el siguiente enlace para obtener más información sobre los líderes políticos que están liberando al mundo.
En tercer lugar, necesitamos el poder del ejército, bajo el mando directo de un gobierno justo, para derribar las increíblemente poderosas operaciones satánicas globales.
Es nuestro trabajo exponer los terribles crímenes de alto nivel, pero en última instancia los ciudadanos comunes no tienen los medios para detenerlos. Se necesita un gobierno temeroso de Dios que despliegue el ejército para acabar con las redes criminales fuertemente armadas en todo el mundo. Utilice el siguiente enlace para obtener más información sobre una operación militar de este tipo.
Podemos darnos palmaditas en la espalda todo lo que queramos, pero al final del día, no podemos hacer nada acerca de los crímenes más grandes y las operaciones oscuras en nuestro mundo, que están dirigidas por trillonarios que poseen miles de miles de millones y pueden controlar el mundo entero con ello.
Necesitamos a nuestro Creador, necesitamos políticos temerosos de Dios y necesitamos a los militares.
Pero, ¿pueden los líderes políticos y los militares salvar al mundo por sí solos? No, ellos nos necesitan tanto como nosotros a ellos. Porque así como hay cosas que sólo ellos pueden hacer, hay muchas cosas que sólo nosotros podemos hacer.
✔︎ Sólo nosotros podemos hacer oír nuestra voz en las escuelas, en nuestro ayuntamiento, en las reuniones de nuestra comunidad local, durante las protestas, etc.
✔︎ Sólo nosotros podemos negarnos a consentir la tiranía insana y dar ejemplo a los que nos rodean de valiente resistencia a los crímenes del gobierno.
✔︎ Sólo nosotros podemos despertar a nuestras comunidades locales a la verdad, distribuyendo información, repartiendo octavillas, organizando discursos, etc.
✔︎ Sólo nosotros podemos dejar de dar nuestro dinero a los sistemas del mal, como la oscura industria cinematográfica, los productos farmacéuticos tóxicos, los alimentos industriales nocivos, etcétera. Si volvemos en masa a lo que es auténtico, puro, bueno y natural, perderán su dominio sobre nosotros.
✔︎ Sólo podemos crear pequeñas comunidades locales donde las corporaciones criminales no lo envenenen todo y donde cultivemos nuestros propios alimentos sanos para nuestras comunidades. Piensa en bosques de alimentos, huertos en los pueblos, etc.
✔︎ Sólo nosotros podemos establecer nuevas alternativas a todos los sistemas del mal y crear soluciones para un mundo mejor.
✔︎ Sólo nosotros podemos establecer hospitales y centros de curación donde la gente pueda encontrar una recuperación real en lugar de ser envenenados por la industria petroquímica de medicamentos.
✔︎ Y así sucesivamente...
Los políticos justos y los militares justos pueden ocuparse de los crímenes extremos a altos niveles, y nosotros somos responsables de los cambios en nuestras propias vidas, y en nuestro entorno inmediato.
Todos nos necesitamos. Todos desempeñamos un papel. Todos podemos hacer algo. Pero ninguno de nosotros es soberano y omnipotente. No caigas en la trampa del orgullo que te ciega hasta la arrogancia. Sé honesto y humilde y comprende que sin las autoridades políticas adecuadas, nada de lo que podamos hacer tendrá un efecto duradero. Por eso la Biblia nos llama a orar fervientemente por nuestros gobiernos. Por eso debemos alzar nuestras voces contra la corrupción gubernamental. Por eso todos debemos implicarnos para que cada gobierno de la tierra se convierta realmente en un servidor del pueblo, en lugar de un tirano que se aprovecha de él. Por lo tanto, todos tenemos que poner de nuestra parte en la lucha contra el fraude electoral para que lleguen al poder realmente los servidores del pueblo y dejen de estarlo las marionetas criminales de las élites.
Por encima de todo, debemos tener el corazón humilde de un niño que sabe que necesitamos a nuestro Creador.
Podemos ser orgullosos y fuertes, listos e inteligentes, educados y ricos, espirituales e ilustrados todo lo que queramos. Al final, todos somos seres humanos débiles y limitados que podemos caer muertos en cualquier momento. Millones de personas mueren cada día. No somos en absoluto tan divinos que seamos intocables e inmortales. Somos seres humanos, frágiles y mortales. Así que dejemos ir nuestro orgullo y admitamos que necesitamos volver a nuestro amoroso Padre celestial, que nos creó para ser amados, valorados, protegidos y guiados hijos del Creador de toda vida.
Incluso el presidente Donald Trump y Robert F. Kennedy Jr hablan abiertamente de que no pueden hacer nada sin Jesucristo. Si ellos ya se dan cuenta y lo declaran públicamente, ¿qué significa para nosotros?
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La Fuente de todo amor está siempre cerca de nosotros. Pero está esperando a que volvamos a casa, aceptemos Su abrazo y aprendamos a vivir con Su amor y sabiduría como guía.
Las fuerzas del mal prosperan con una humanidad desconectada del Creador. Pero pierden cuando nos reconectamos, encontramos la verdadera dirección, ganamos fuerza y recibimos la sabiduría divina.
¿Somos divinos? Sí. Pero sólo porque hemos sido creados por la Divinidad. Sin nuestro Creador, no somos más que un montón de arcilla.
Seamos humildes.
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